Nació en Capacho, estado Táchira, el 12 de Marzo de 1916. Graduado en Ciencias Médicas en 1.938, comprendió tempranamente que el lecho del enfermo y la sala de autopsias como soporte científico para el que hacer médico no son los sitios apropiados para resolver los grandes problemas de las enfermedades endemo-epidémicas que para la época del inicio de su carrera, en 1938, prevalecían en el país. Por eso encaminó sus paso hacia los lugares de donde procede el paciente, su medio familiar, sus sitios de trabajo, la comunidad; hacia la indagación de las desigualdades sociales, y la identificación de la pobreza, la ignorancia, la suciedad como factores de riesgo, que se interponen a las aspiraciones de mejores condiciones de vida de la gente.

Esta amplitud de miras lo llevó a trabajar como Médico Jefe de la Unidad Sanitaria de San Antonio del Táchira (1939), la de Trujillo (1.941), San Cristóbal (1.943), Maracaibo (1.945) y luego en la Dirección de Salud Pública del S.A.S. después de haber regresado al país, al concluir sus estudios de postgrado en la Escuela de Salud Pública de la Universidad de John Hopkins, donde obtuvo el doctorado en la especialidad. Uno de los pocos venezolanos que ha obtenido ese rango académico, lo cual le permitió mantener estrechas y relevantes relaciones con la O.P.S., como representante del País, en la I, la III, la IV y VI Asambleas Mundiales de la Salud, en la III y IV Reuniones de su Consejo Directivo, y miembro del Consejo Ejecutivo de la O.M.S. como persona designada por Venezuela en el período 1.954 - 1.955.

En 1.955, fue designado Jefe de la Dirección de Salud Pública de la Oficina Sanitaria Panamericana, en Washington, DC. EE.UU. y Subdirector de la misma, entre 1.955 y 1.958, cuando fue llamado por la Junta de Gobierno de Venezuela para desempeñar el cargo de Ministro de Sanidad y Asistencia Social.

Al cesar estas funciones regresó a su cargo de Sub-Director de la O.P.S. hasta diciembre de 1.960, cuando regresó al país por razones familiares.

Fue Asesor-Técnico del S.A.S. y destacado en Comisión de la Universidad Central de Venezuela, para desempeñarse como Jefe del Departamento de Medicina Preventiva y Social de la Escuela de Medicina, José Vargas.

En enero de 1.967, asumió el cargo de Secretario Ejecutivo de la Asociación Venezolana de Facultades y Escuelas de Medicina (AVEFAM) hasta 1.990, fue su fundador e impulsor; bajo su conducción esta organización vivió su periodo más brillante y fructífero. La incorporó a la FEPAFEM (Federación Panamericana de Facultades - Escuelas de Medicina) organismo al cual también contribuyó a crear, organizar y a fortalecer.

Durante el período 1.961-70, cumplió diversas funciones temporales en el ámbito internacional, como participante en las reuniones de los comités de expertos de la O.M.S., en abastecimiento de aguas, en la organización de los servicios rurales de salud; en el programa mundial de erradicación de la malaria, que lo hizo viajar ampliamente a varios países europeos, africanos y asiáticos; en otras diversas cuestiones tales como estadísticas de salud, epidemiología de la enfermedades venéreas, adiestramiento del personal de salud, reorganización de los servicios de Salud Pública en Tojo (Africa); y para la erradicación de la malaria, en Malasia (Asia).

También desarrolló actividades en la formación de profesionales de salud, en particular en la de médicos, a través de la FEPAFEM, a la cual contribuyó a vigorizar, mediante el desempeño competente de diversos cargos y actividades cumplidas en esa institución. Fue miembro del Comité Asesor de la O.M.S. sobre libros de texto en Medicina Preventiva y Social, Organizador y Relator de diferentes Seminarios Nacionales de Educación Médica, Miembro del Grupo Técnico designado por la O.M.S. para analizar las relaciones entre los servicios de salud y las Escuelas de Medicina en varios países europeos. Organizador de seis Seminarios de Epidemiología para docentes clínicos, auspiciados por la FEPAFEM, dos en Venezuela y los otros cuatro en otros países latinoamericanos, (Argentina, Chile, Brasil, Colombia).

Perteneció a la Asociación Internacional de Epidemiología, fue miembro de su Comité Ejecutivo por seis años. La Sociedad Venezolana de Salud Pública le confirió el Premio Armando Castillo Plaza, en 1.967; la Sociedad de Médicos Higienistas lo designó Miembro Honorario, también fue Miembro Honorario de la Sociedad Venezolana de Salud Pública; perteneció a la Real Sociedad de Salud Pública de Gran Bretaña, y a la prestigiada Asociación Norteamericana de Salud Pública.

Le fueron otorgadas diversas condecoraciones por el Gobierno Venezolano; Orden del Libertador, Orden Francisco de Miranda; Orden Andrés Bello; por el Ecuador: Orden del Mérito; por el de Cuba: Orden Carlos Finlay. Fue elegido como miembro de la "Society of Shcolars" por la Universidad de John Hopkins; como postgraduado muy distinguido en el campo académico. La Universidad de Los Andes, realizó una ceremonia para celebrar el conferirniento de este Diploma y la Medalla correspondiente al título otorgado (1.982 - 1.983), por considerar que la distinción honraba también a esta Institución.

Fue autor de más de 100 publicaciones, de un libro de texto sobre Epidemiología, traductor de obras de gran significación para el mundo académico hispanoamericano como "Salud y Sistema", del Dr. Mario Chaves; del mismo autor: "La Salud como un Proceso de Cambio", "Introducción a la Medicina de Familia" del Profesor Canadiense Dr. Jan Mc. Whinney, varias monografías (vertidas al español, inglés, francés, ruso) y muchos artículos aparecidos en revistas científicas, editadas en Venezuela y en otros países.

En 1.971, al retirarse del servicio activo del S.A.S., la Universidad de Los Andes tuvo el acierto y la fortuna de incorporarlo a su serio, adscrito al Departamento de Medicina Preventiva y Social de la Facultad de Medicina. Aquí desarrolló una destacada labor: creó e inició los Cursos Medios de Salud Pública; al principio como cursos de Medicina Integral; fue promotor de un programa pedagógico auspiciado por la FEPAFEM, destinado a mejorar la capacidad del profesorado de medicina, que le dio continuidad la Oficina de Educación Médica creada por la Facultad de Medicina; fue promotor del proyecto de Medicina Comunitaria como parte del Programa continental auspiciado por la FEPAFEM y la Fundación Kellog.

Se interesó también en desarrollar la organización del Centro Ambulatorio de Puente Real, estado Mérida, y comprendió cabalmente la necesidad de prepararle el personal apropiado, lo cual gestionó a través de las vinculaciones de amistad que tenía con el Dr. Adolfo Velez, Profesor de la Universidad del Valle del Cauca, en Cali, Colombia; pionero y creador del programa de Cirugía Simplificada, que llevaba a cabo en el Hospital Universitario de la misma ciudad, como un modelo exitoso de atención quirúrgica, hizo posible la capacitación de un equipo quirúrgico, multidisciplinario, enviado a Cali, para reproducir el modelo en San Cristóbal. Este servicio se estableció en 1.978, con el apoyo del Gobernador de entonces el Dr. Ricardo Méndez Moreno, y bajo la dirección técnica del Dr. José María Betancourt. El programa, hoy denominado de cirugía sistematizada ha recibido especial impulso y progresado significativamente bajo la responsabilidad de su actual dirección y el desempeño competente de su equipo de trabajo.

Su obra excepcional fue el resultado de la perseverancia, de su amor por el trabajo organizado, metódico, sin concesiones a la improvisación, sujeto a una disciplina. Fue el fruto de su claro pensamiento, orientado por su profundo espíritu venezonalista que se extendió a lo universal, pero que se afirmó en el amor a su terruño y a la gente de su Capacho natal.

Su esfuerzo y su lección permanente estuvieron dirigidos a la eficiencia y al rendimiento eficaz de la empresa de la salud, y que ésta estuviese "manejada con las manos y la conciencia limpias".

Su gran profesionalismo los sustentó como un estado de conciencia, con una sólida base moral aprendida en su hogar y en el entorno socio-cultural del pueblo donde nació. En esa atmósfera espiritual se originó posiblemente su vocación de servicio a la gente sencilla, su sentido de responsabilidad, su perseverancia en el esfuerzo sostenido hacia la consecución de un propósito; su apego al orden, fue tradicionalista en el mejor sentido de la acepción. No como un estado estático, sino como transmisión de los valores formados por sus antepasados, como lo define el Dr. Mario Briceño Yragorri.

Tuvo un respeto profundo por los valores sustentados por la gente de su pueblo, exaltó en sus escritos, las virtudes del procerato civil o militar de la gente común: maestros de escuela, sacerdotes, herreros, talabarteros, servidores públicos. En cada uno de ellos vió ejemplos de dignidad, honestidad, sencillez, pulcritud, respeto a las jerarquías, firmeza de carácter, repudio a las actitudes de adulancia para el poderoso. Se complacía en destacar la transcendente actitud de "un sacerdote en función de maestro que enseñaba a leer, pero también enseñaba a trabajar la madera, hendir el arado, o dirigir un tractor sobre la tierra dura".

No podemos omitir lo que dijo del campesino capachero, similar a lo que podría decirse de cualquier campesino venezolano: "Cepa de muchos que hoy lucen borlas universitarias u ocupan altas posiciones sociales o económicas". Pidió para ellos el reconocimiento al que tenían derecho pues trabajaban duro. Y es el trabajo en sí lo que enaltece a la persona, y no la posición. Hizo hincapie en la bondad de la gente sencilla, en la amistad sin reservas, el servicio oportuno, el concepto de responsabilidad que hace de la palabra empeñada un compromiso de honor. El mismo fue un prototipo de todos estos rasgos.

Se casó en primeras nupcias con Carmen Ibarra, con quien tuvo cuatro hijos (dos hembras y dos varones) y en segundas nupcias con Esperanza Celis con quien tuvo una hija. Falleció en Caracas el 6 de marzo de 1988.

Fue un maestro que enseñó con el ejemplo de su vida. Hemos dicho de él: "Que la exaltación de su vida sirve para formar la conciencia de toda persona que desee realizar obra de significación al servicio del país, porque fue prototipo de sanitarista, de maestro y de venezolano ejemplar".

Citas de Referencia.

Sequera, H. (1993). Semblanza: Dr. Carlos Luis González. MedULA. Revista de la Facultad de Medicina de la ULA. Vol. 2 Nº 1-2. Mérida, Venezuela